Cuando el silencio es un grito, cuando el dolor es un sinsentido, cuando las ausencias matan, cuando la infancia y la inocencia son tesoros...
Cuando un niño o cualquier ser sea violentado, ahí en ese lugar y en ese momento es precisa, necesaria y esencial la resiliencia. Las imágenes valen más que mil palabras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario